Saqué de la biblioteca Pálido Fuego, de Nabokov, libro que había intentado leer 10 años atrás. No pude entonces, fui vencida, derribada, creo, a las cuatro páginas.
Sin embargo esta vez sí. Nota de tapa que me sedujo:
Ejemplo principal de su maestría es Pálido Fuego – poema en pareados decasílabos de 999 versos divididos en 4 cantos, seguido de un exhaustivo comentario- obra que refleja el gusto de Nabokov por el juego intelectual y los artificios literarios. Bajo la apariencia de un trabajo erudito, se esconde un melodrama a la antigua con tres personajes principales: un loco que trata de asesinar a un rey imaginario, otro loco que se imagina que es ese rey y un distinguido y viejo poeta que se encuentra por casualidad en la línea de fuego y perece en el choque de las dos ficciones.
Pálido Fuego, Vladimir Nabokov. Editorial Bruguera, 1977. Traducción de Aurora Bernárdez
Aprovecho para poner mi foto favorita del autor con sus mariposas (¿serán las mariposas pálido fuego también?)